– ¿No puedo circular si no me han hecho el diagnóstico a bordo (OBD)? Error, claro que se puede circular si el coche está en condiciones y con la ITV pasada. Es a partir del 10 de septiembre cuando se ha comenzado a acceder a las centralitas a través del sistema de diagnóstico abordo. En un primer momento se está analizando el sistema de control de emisiones del vehículo, supervisando si existen averías, códigos de error o algún tipo de manipulación fraudulenta. Esto no es más que el comienzo, ya que después, cuando el Ministerio de Industria lo establezca, vendrá la inspección de los sistemas de seguridad controlados electrónicamente, tales como el airbag, el ABS, etc., que no se pueden inspeccionar si no es través de la centralita.
– No puedo circular con un coche diésel. Desde Aeca-ITV el mensaje ha sido claro: no podrán circular los coches diésel que contaminen más allá de la normativa. Si el coche está en condiciones y ha pasado la inspección, sólo habrá que tener en cuenta las restricciones de acceso que, en su caso, cada ciudad haya establecido en sus Protocolos de medidas anticontaminación.
– ¿Retrasarla? No, no se puede retrasar la ITV. Lo que sí se puede, y es lo que ha cambiado, es adelantar la fecha de la inspección hasta un mes, sin esperar al vencimiento del plazo preestablecido y sin que ello afecte a la fecha de la siguiente inspección.
– ¿Cambiar de estación si te da desfavorable? Si por alguna razón el vehículo no supera la ITV, se podrá cambiar de estación para que sea inspeccionado de nuevo. Pero hay que tener en cuenta que esta nueva inspección, al ser en distinta empresa o centro de ITV, tendrá un coste que dependerá de cada empresa. El usuario deberá informarse antes de hacer cualquier cambio.
– ¿Tengo que llevar la factura del taller? Si la primera inspección ha salido desfavorable, la estación de ITV va a pedir el CIF o Razón Social del taller que efectuó la reparación que será anotado en el Informe de Inspección, o anotarán auto reparación en el caso de que lo haya arreglado el automovilista. En el primer caso, si bien no es obligatorio, es recomendable que el usuario pueda aportar la factura del lugar donde se haya reparado el vehículo.
– ¿Va a haber más suspensos por emisiones? No tendría por qué haberlos. Los límites no se modifican. Lo que cambia ahora es la forma en la que se inspeccionan determinados vehículos a través del OBD. No sustituye al control de emisiones física (tal como se hace actualmente). Primero se efectuará el chequeo del sistema de emisiones del vehículo por el puerto OBD y si todo está correcto, se seguirá con la verificación de los gases por el tubo de escape.
– ¿El cuentakilómetros cuenta? Siempre ha contado. Desde 2013 en las estaciones se tomaba nota de los kilómetros que se añadían al informe, pero ahora, si está defectuoso, fuera de servicio o no se puede leer, habrá que reemplazarlo antes de acudir a la cita, ya que, en caso contrario, la inspección será desfavorable. Es obligatorio que se puedan ver los kilómetros y que no haya evidencias de manipulación.
Y más allá de los cambios normativos, el coche es un seguro de vida, por lo que habrá que revisar los elementos que más problemas causan. En este sentido, el segmento en el que más defectos graves se encontraron fue el de alumbrado y señalización (24,1%), seguido de ejes ruedas, neumáticos y suspensión (20,8%), emisiones contaminantes (16,4%) y frenos (13,3%). No es un dato cualquiera, más de cuatro millones de vehículos son rechazados por la ITV en primera inspección.
